vale la pena

quizás sería mejor no escribir nada,
como tantas veces, pero hay que expresarse...
vale la pena...

mentiras hasta el cielo, de la vida moderna...
las prisas, penas, pisos... de 30...

siempre llega a mi la canción perfecta, el eslogan idóneo...
para errar, para seguir errando en mi vida fugaz...
quedan menos días para el fin de estos 365...
quizás no haya vuelta atrás...
quizás no hay nada más...
ni sueño ni nada...

ni lágrimas...

quizás quieras perderte por los bosques perdidos...
quizás no echaremos de menos esta mierda de ciudad...
y dejarlo todo...
dice la habitación roja...

la primera estrella a la derecha...

siempre quizás...
nunca jamás...

el deseo derrite los instantes, por todas partes, nos vuelve indomables...
irreverentes... y en ese momento volví la vista a esa zona de la pista...
que ahora tiene restos nuestros...
de aquel día que las cosas surgieron de manera sorprendentemente natural, con el feeling...

sin palabras, sin saber nada de nada, de nosotras mismas...

luego vas conociendo partes de las personas, quizás por las malas lenguas...
y te decepcionas, y también por como sucede...
y todo saldrá bien, dicen...
y hoy pierdo un poco...
y me enredo en cosas que quizás realmente no importan...
y quizás no conteste nunca más...
quizás no valga la pena...
en un mundo raro...

y saber porqué mi padre está mal...
y si mi hermana ya puede mover bien los brazos...
y si mi abuela está bien...
supongo que si...

lo que importa, importa...
manzanita, manzanita que a mi corazón incita...
y que yo nunca recibo las caricias de su miel...
con tu dulzón resucita...
sin quererlo, sin serlo...
pero pensándolo bien...

lo intentaré dibujar...
y soñar de nuevo, intentaré ir al lavabo...
otras semana más, llena de días y de horas...
¿en silencio?

si te acuerdes de mi..